- El gráfico del Ethereum a largo plazo muestra una acción del precio apuntalada tras el desalentador 2022 liderado por el aumento de la inflación.
- La estacionalidad del ETH muestra junio y septiembre como el mejor momento para comprar.
- La acción del precio del Ethereum debería beneficiarse de la eficiencia energética tras la Fusión.
- La adopción del marco legal muestra la aceptación de las criptomonedas.
- Los datos de los futuros del CME apuntan a un equilibrio entre compradores y vendedores, mientras que el interés nunca había sido tan grande.
- Todos los bits y piezas juntos sumados apuntan hacia un precio del ETH al alza.
La acción del precio del Ethereum (ETH) está a punto de cerrar 2022 con un pésimo rendimiento del -65%, convirtiéndolo en un año que los inversores querrán olvidar rápidamente. Los factores clave que desencadenaron esta liquidación incluyeron la fortaleza del dólar estadounidense, que fue el refugio seguro preferido en un año en el que los riesgos geopolíticos se elevaron a un nivel no visto en varias décadas, y las cifras de inflación al alza. Incluso podría haber sido ese elemento específico, la inflación, la principal razón por la que la capitalización de mercado de varias criptodivisas ha ido disminuyendo a lo largo del año.
Los hogares de todo el mundo han visto cómo aumentaban las facturas de la comida, el alquiler y la energía, lo que se ha llevado gran parte de sus gastos y ha hecho que la parte de su renta disponible para inversiones sea mucho menor o incluso inexistente. En un momento dado, los inversores incluso retiraron sus inversiones y tuvieron que recurrir al efectivo para poder llegar a fin de mes y pagar todas las facturas. Con la inflación disminuyendo un poco según las últimas cifras y varios bancos centrales con la misión de devolverla a niveles manejables, 2023 podría ser el año para que el Ethereum actúe como el niño que regresa a casa.
El gráfico a largo plazo muestra que el precio del Ethereum está apuntalado
El precio de Ethereum está viendo cómo los alcistas intentan apuntalar al precio, como han estado intentando hacer durante todo el año. En noviembre, se identificó un segundo punto en el que los alcistas del ETH querían soportar la acción del precio. Con ese mínimo confirmado, una tercera confirmación ha revelado una línea de tendencia ascendente que viene de junio de 2022 (línea verde en el gráfico de más abajo).
El Ethereum cotiza actualmente muy bien junto a esa línea de tendencia (verde) y, de cara a finales de 2022, busca cerrar por encima de ella, lo que la convierte en un elemento de apoyo muy importante. Se esperan fuertes compras en ese nivel de soporte. Por el lado bajista, la línea de tendencia descendente (roja) viene del máximo de mayo de 2021 y, por el camino, se ha visto con un respeto muy sólido a lo largo de 2022.
Esto la convierte en una formación de banderín que se acerca a su punto de ruptura en el primer trimestre de 2023. El Índice de Fuerza Relativa (RSI) aún se encuentra en el extremo inferior del espectro, lo que ofrece un amplio motivo y potencial alcista para que los compradores impulsen al precio al alza. En caso de ruptura, primero se produciría un repunte del 45% hacia los 1.700$, que debería ser un nivel fundamental en el futuro con un desvanecimiento y cierta recogida de beneficios. Si los alcistas son capaces de romper ese techo, el nivel redondo de 2.000$ volverá al juego con un posible movimiento alcista hasta aproximadamente 2.480$, en el 50% de Fibonacci.